los-numeros-del-aborto

Toda problemática social, a la hora de ser analizada, cuenta con un marco teórico o ideológico y uno casuístico o estadístico. Providas o abortistas, ambos, a la hora de exponer ideas, vamos a terminar analizando, en algún momento, la parte fría de la cuestión: los números.
Veamos cómo se obtuvieron las cifras de las que tanto se habla.
Las agrupaciones a favor del “derecho” al aborto hablan de números que rondan el medio millón de abortos anuales en nuestro país. Esas cantidades surgen de una investigación realizada durante 2005 y financiada por el Ministerio de Salud de la Nación.

Medir la dimensión de una práctica clandestina no es sencillo. Se utilizaron dos metodologías. La primera, basada en estadísticas del sistema de salud, utilizó el registro de egresos hospitalarios en el que quedan asentadas las atenciones médicas debidas a abortos complicados. Se parte del supuesto de que estos casos, que demandan atención médica, representan sólo una parte del total de abortos inducidos, y se estableció un factor multiplicador, que basado en diversos criterios se fijó en 7, es decir, del total de mujeres que llegan a un hospital por abortos se considera que hay otras 7 que abortaron y no necesitaron de asistencia médica oficial. Según este método la estimación fue de 446.000 mil abortos anuales.
La otra manera que se utilizó, concluyó en un número que oscila entre las 486.000 y 522.000 interrupciones de embarazo inducidas. La estimación indica que cada mujer a lo largo de su vida fértil se practicaría dos abortos y habría poco menos de un aborto por cada nacimiento.
Ahora bien, esos son los números obtenidos con los métodos reconocidos internacionalmente para la medición de la cifra negra de abortos.
Pero ¿qué pasó en otros países?
Tenemos el ejemplo de México y España, donde se estimaban cifras cercanas al medio millón de abortos y al legalizarse la práctica las cifras oficiales mostraron una considerable reducción.
En España, para el año 1976, las estadísticas hablaban de 300.000 abortos clandestinos anuales. En 1985 se despenaliza la práctica y en 1986 los datos oficiales arrojaron una cifra de 17.000 abortos cada 12 meses.
En México, por el año 2006, “Human Rigth Watch” estimó una cifra entre medio y un millón de abortos anuales. En 2007 se legaliza la interrupción del embarazo y cuatro años más tarde, en 2011, se constata que se habían practicado 52.500 abortos, solo 16.000 por año, no un millón.
En ambos países las estadísticas arrojaban cifras muy superiores a las constatadas una vez relevados los números reales.
Queda en evidencia que los métodos estadísticos utilizados producen cifras sobrevaluadas, y hablar de una problemática de salud pública con tales antecedentes, hace que el argumento pierda consistencia.
No queda más que pensar que quienes necesitan manipular estadísticas inflando las cifras, lo hacen para ganar consensos en un tema que, sin tal argumento, no tendría la difusión que ha alcanzado.
Por otra parte, cabe agregar que en los países en donde se legalizó el aborto, transcurrido un año de su legitimación, la cifra fue en franco aumento, porque es una verdad de perogrullo que la punición de una conducta desalienta su comisión, allí donde opera la conciencia y el sentido de justicia que se activa, en mayor o menor nivel encendiendo luces de alerta.
A contrario sensu, al legitimar legalmente una conducta, consagrando su realización como un derecho individual, lo que pasa a ser antijurídico o ilícito es privar o perturbar el ejercicio de la conducta, porque se estará lesionando un derecho tutelado por el ordenamiento jurídico.
Consideramos que el “derecho a la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 14”, es el eufemismo utilizado para priorizar los deseos individuales sobre la responsabilidad de nuestras acciones.
Lejos estamos de juzgar y condenar. Como fundación asumimos el compromiso de trabajar con abnegación para que las familias sean restauradas. Sabemos que es una tarea ardua, pero cuyos frutos lo valen todo.

Gabriela Taló
Abogada.
Escribiente del Poder Judicial.
Miembro del Proyecto Familias Transformadas.
Fundación MCA Casa de Hijos. #ArgentinaUnidaPorLaVida #AFavorDeLaVida